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Cuando escuché por primera vez el término "ecualización sustractiva" no quedé muy convencido. ¿Qué hacemos la mayoría de nosotros instintivamente cuando estamos ecualizando nuestra mezcla?. Además de recortar frecuencias, potenciamos allí donde tenemos la sensación de que va a ser necesario. Quizás los 300KHz en una guitarra, quizás los 200 en una voz... Pues bien, decidí remezclar un tema utilizando los principios de la ecualización sustractiva y quedé tan sorprendido por los resultados que ahora ésta técnica se ha convertido en mi principal método de aproximación a la ecualización de una mezcla.
¿Qué nos sugiere la ecualización sustractiva? Sencillamente ecualizar sólo recortando frecuencias, sin potenciar ninguna. Por un lado tenemos los recortes estándar que todos solemos hacer en las frecuencias bajas y las altas para quitar "energía" que no aporta a la mezcla y hacer sitio para otros instrumentos. La ecualización sustractiva sugiere que recortemos siempre, y lo hagamos tanteando con un barrido hasta el punto donde el sonido comience a "desnaturalizarse". Y no sólo eso. He visto auténticos maestros de la mezcla, como Julio Posadas que basados en su experiencia son capaces de intuir cuándo determinadas frecuencias aún siendo parte del espectro "natural" del instrumento pueden ser eliminadas puesto que se van a solapar con otros instrumentos que poseen el mismo rango. Lo que podríamos llamar "recorte de solapamiento". Eliminando esas frecuencias que se solapan no sólo ganaremos en la tan preciada claridad sonora sino que reservaremos espacio para poder darle más fuerza al tema en la masterización. Por poner un ejemplo: tenemos un bombo en una canción de rock que va a ir acompañado muy de cerca por un bajo. Al ecualizar el bombo y aplicar los cortes en las frecuencias bajas y altas, podemos eliminar las frecuencias en las que se solapa con el bajo. Cuando escuchemos el bombo en solitario nos dará la impresión (porque de hecho así es) de que su sonido se habrá desnaturalizado un poco, pero si ahora lo escuchamos con el bajo, nos daremos cuenta que nuestro oído no echa de menos esas frecuencias. Es más, si escuchamos a los dos antes y después de éste recorte "extra" de frecuencias, podremos apreciar más claridad en su conjunto. Adicionalmente se pueden recortar las frecuencias que, aún formando parte del espectro del instrumento, añaden más confusión sonora que otra cosa. La técnica para realizar esta "ecualización de limpieza" es también realizar un barrido potenciado y allí donde escuchemos el ruido característico de las frecuencias que enturbian, proceder a recortar la frecuencia hacia abajo. Taratamos en detalle ésta técnica en el siguiente post: "Eliminando frecuencias parásito en tu mezcla" Una vez hecho todo ésto con todos nuestros instrumentos, veremos que hemos salvado un montón de espacio y energía. En la fase de masterización si que potenciaremos frecuencias, comprimiremos, y quizás volvamos a ecualizar pero las ventaja de haber realizado una ecualización sustractiva serán visibles, traducidas en una mayor claridad y más espacio para plugins y darle potencia a nuestro tema. Como todo en este mundillo, no es un truco infalible ni que funcione quizás para todos los estilos y desde luego no para todos los temas, pero realizar el experimento merece desde luego la pena. Os animo a remezclar uno de vuestros temas antiguos siguiendo éste principo y podeís comentar qué tal os ha ido. Muchas gracias y que la música os acompañe!
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